Que siempre te querré.

Que cuando te veo pasar, no sé mirar a otra parte que no seas tú.
Que cuando patinas, no sé mirar otra tabla que no sea la tuya.
Que cuando me conecto, no sé mirar otra letra que tu inicial.
Que cuando te hablo, no sé hacer otra cosa que sonreír porque simplemente me contestaste.
Y, que, cuando te miro, sólo sé perderme entre tus preciosos ojos azules que me piden que te ame.

No hay comentarios:

Publicar un comentario