Puedes, deseo. Ojalá.

Hoy por hoy, no sé qué me pasa. No sé qué me has hecho. Pero no me desagrada para nada. Te dejo seguir haciéndolo. En dos días has dibujado muchísimas sonrisas en mi cara con simples mensajes de texto.
Y llámame ilusa, o estúpida, o adorable, o incluso inmadura. Me da igual. Yo sólo sé que en esto del amor aún soy principiante, y me queda mucho por aprender. Sobretodo en este tipo de amor. Pero, una vez más, me da exactamente igual. 
Puedes decirme que no es posible, o insinuarme una vez más que hay tantas posibilidades como peces en el mar. Puedes sonreírme, o apartarme la cara. Puedes mandarme sms bonitos, o puedes no hacerlo. Puedes llenar mi corazón con palabrería, o puedes llenarlo con sentimientos reales. Puedes dejarme dormir contigo, y puedes abrazarme. Puedes quererme, y hacer que yo te quiera. O puedes no hacerlo.
Por poder, puedes hacer muchas cosas. 
Pero, por desear, yo deseo otras muchas.
Como que cumplamos todos esos mensajes, como que nos comamos a besos día sí, y día también, o como que me hagas creer que de verdad el amor existe. Deseo que me demuestres muchas cosas, porque sé que tú podrías. Llámame tonta, pero es que simplemente lo sé. También deseo pasar las mañanas junto a ti, en nuestra cama, abrazadas, pero siempre y cuando me hubieses traído aquel café y aquellas tostadas a la cama.  Desearía que no se quedase en ilusiones, de verdad. Desearía que no se quedase en otro sueño más. Desearía morirme por verte, y al verte morirme. Desearía sentir que no son más que fantasías. Desearía que estés a mi lado. 
Pero, hoy, yo no estoy para hablar de lo que yo deseo, o para hablar de lo que tú puedes hacer o dejar de hacer.
Hoy estoy aquí para decirte que no me cuesta saber que eres especial, porque sé que lo eres. También sé que podríamos ser mucho, sólo si supiésemos. Y sé que nosotras podríamos aprender a serlo. Sé que tus besos me han sabido mejor que los de nadie en mucho tiempo, y que eso tiene que significar algo. Ahora, tan sólo sé, que quiero volver a rozar tus labios. Una y otra vez.


Aunque, repito que tal vez sólo sean sueños.

1 comentario: